Hola mi darling,
Llegó el verano y con él la hora de aceptar la realidad del estado de nuestros cuerpos por más triste que sea!
Salen los primeros rayos de sol y claro, una quiere ir a la playa ... ahí empiezan los problemas!!!! una se prueba el bikini y horror de horrores "descubre" que no estaba tan atlética como pensaba … ¡entramos en estado de desesperación, rápidamente cambiamos nuestra dieta a base de chocolate por una a base de lechuga ... empezamos a tomar 8 vasos de agua al día, corremos a matricularnos en un gimnasio, contratamos masajista, pagamos sesiones de endermologie ... y si la cosa está realmente grave buscamos a un Dr. 90210 para ver qué puede hacer para salvarnos!
La verdad mi darling es que a estas alturas del partido una está tarde ... a menos que tengas 20 años y la piel firme como cuerda de guitarra bien afinada, o que planees empezar a veranear en febrero, tus primeros fines de semana en la playa mostrarán ese cuerpo de manatí (¡¡o peor aún de sharpei!!) que has cultivado todo el invierno!!! Créeme, rezar no ayuda, tampoco tomarte una pastilla para los nervios que te haga dormir confiando en que al despertar descubrirás que todo ha sido un mal sueño ... no, ese cuerpo es tuyo ¡acéptalo!
¿Qué hacer? Mi recomendación es concha ... y manos a la obra!! No me refiero a un menú marino a base de conchas que te transformará mágicamente en 10 la mujer perfecta de la noche a la mañana, no mi darling eso no existe, me refiero a ponerte el bikini con concha, frescura, desparpajo ... no te queda otra ... y manos a la obra de inmediato para que en enero empieces a mostrar formas humanas apetecibles y en febrero estés re-hot! Lo peor que puedes hacer es correr a comprar una ropa de baño entera, porque entonces te resignarás y nunca volverás a ser lo que fuiste ... tampoco se trata de sentarte mustia en una esquina envuelta en un pareo como fardo funerario ¡no! eso llama mucho la atención e inspira lástima!!! Nada, ponte el bikini y finge que estás orgullosa de tu cuerpo!!! ... si el problema es la barriga ¡ajusta! y trata de no distraerte con la conversación porque si te relajas tu barriga va a mostrar su vocación de rompe muelle múltiple, y las miradas de inmediato se dirigirán justo ahí!!! ... si el problema son las caderitas o las piernitas, trata de no correr despreocupada hacia la orilla durante el primer mes (¡aunque te mueras de calor o te queme la arena, carajo!) porque sería un exceso, y si el problema son las tits, caballero pues, a jalar bien las pitas del sostén para que las mantenga erguidas aunque sientas que te estás desnucando!
Ah! y olvídate de jugar volley o paletas sin cubrirte, porque no se va a ver bien, créeme … y por supuesto, de los helados, piqueitos, cervecita y demás ¡a ti sólo te puede provocar agua sin gas!
El bronceado siempre ayuda a disimular las imperfecciones, o sea que si puedes ir a uno de esos sitios que te broncean para no llegar a la playa color dormitorio ¡mejor! Otro consejo es que inviertas en un accesorio lindo, así les das a tus amigas la oportunidad de hacerte un comentario simpático que te levante la autoestima sin tener que mentir, tipo "qué lindos tus lentes" "lo máximo tu pareo" "regio tu bolso de playa" ... y por supuesto, tu pelo, manos y pies tienen que lucir maravillosos (¡siempre tratando de compensar pues!).
Te aseguro que en febrero cuando estés espectacular - si es que has seguido una dieta balanceada y has ejercitado tu cuerpito con perseverancia - nadie va a recordar cómo lucías en diciembre ... y ahí te podrás dar el gusto de correr hacia la orilla como Pamela Anderson en su mejor temporada de Baywatch! ¿o no?
Beso,
Schere
Llegó el verano y con él la hora de aceptar la realidad del estado de nuestros cuerpos por más triste que sea!
Salen los primeros rayos de sol y claro, una quiere ir a la playa ... ahí empiezan los problemas!!!! una se prueba el bikini y horror de horrores "descubre" que no estaba tan atlética como pensaba … ¡entramos en estado de desesperación, rápidamente cambiamos nuestra dieta a base de chocolate por una a base de lechuga ... empezamos a tomar 8 vasos de agua al día, corremos a matricularnos en un gimnasio, contratamos masajista, pagamos sesiones de endermologie ... y si la cosa está realmente grave buscamos a un Dr. 90210 para ver qué puede hacer para salvarnos!
La verdad mi darling es que a estas alturas del partido una está tarde ... a menos que tengas 20 años y la piel firme como cuerda de guitarra bien afinada, o que planees empezar a veranear en febrero, tus primeros fines de semana en la playa mostrarán ese cuerpo de manatí (¡¡o peor aún de sharpei!!) que has cultivado todo el invierno!!! Créeme, rezar no ayuda, tampoco tomarte una pastilla para los nervios que te haga dormir confiando en que al despertar descubrirás que todo ha sido un mal sueño ... no, ese cuerpo es tuyo ¡acéptalo!
¿Qué hacer? Mi recomendación es concha ... y manos a la obra!! No me refiero a un menú marino a base de conchas que te transformará mágicamente en 10 la mujer perfecta de la noche a la mañana, no mi darling eso no existe, me refiero a ponerte el bikini con concha, frescura, desparpajo ... no te queda otra ... y manos a la obra de inmediato para que en enero empieces a mostrar formas humanas apetecibles y en febrero estés re-hot! Lo peor que puedes hacer es correr a comprar una ropa de baño entera, porque entonces te resignarás y nunca volverás a ser lo que fuiste ... tampoco se trata de sentarte mustia en una esquina envuelta en un pareo como fardo funerario ¡no! eso llama mucho la atención e inspira lástima!!! Nada, ponte el bikini y finge que estás orgullosa de tu cuerpo!!! ... si el problema es la barriga ¡ajusta! y trata de no distraerte con la conversación porque si te relajas tu barriga va a mostrar su vocación de rompe muelle múltiple, y las miradas de inmediato se dirigirán justo ahí!!! ... si el problema son las caderitas o las piernitas, trata de no correr despreocupada hacia la orilla durante el primer mes (¡aunque te mueras de calor o te queme la arena, carajo!) porque sería un exceso, y si el problema son las tits, caballero pues, a jalar bien las pitas del sostén para que las mantenga erguidas aunque sientas que te estás desnucando!
Ah! y olvídate de jugar volley o paletas sin cubrirte, porque no se va a ver bien, créeme … y por supuesto, de los helados, piqueitos, cervecita y demás ¡a ti sólo te puede provocar agua sin gas!
El bronceado siempre ayuda a disimular las imperfecciones, o sea que si puedes ir a uno de esos sitios que te broncean para no llegar a la playa color dormitorio ¡mejor! Otro consejo es que inviertas en un accesorio lindo, así les das a tus amigas la oportunidad de hacerte un comentario simpático que te levante la autoestima sin tener que mentir, tipo "qué lindos tus lentes" "lo máximo tu pareo" "regio tu bolso de playa" ... y por supuesto, tu pelo, manos y pies tienen que lucir maravillosos (¡siempre tratando de compensar pues!).
Te aseguro que en febrero cuando estés espectacular - si es que has seguido una dieta balanceada y has ejercitado tu cuerpito con perseverancia - nadie va a recordar cómo lucías en diciembre ... y ahí te podrás dar el gusto de correr hacia la orilla como Pamela Anderson en su mejor temporada de Baywatch! ¿o no?
Beso,
Schere